Un Adiós en un Lecho de Muerte
Si te digo adiós, no es porque no te quiera,
porque mi vida eres tú.
Me llevo muy adentro de mí
tu mirada de niña enamorada,
que llenan de alegría hasta el último rincón de mi alma,
y la dulzura de tus labios de manzanitas rojas
que me hacían sentir el amor de un ángel apasionado.
Quizás nunca pueda olvidarte
y que te pueda llevar como mi sombra de la mano,
pero te digo adiós no porque no te quiera,
porque tú eres la razón de mi vida,
y mi única mujer que me has hecho feliz
la que me diste tu corazón en mis manos,
y ese amor loco que tanto amo
que me llenaron de placer y de gozo,
que llegue a tocar el cielo con una mano.
Te digo adiós no porque yo quiera partir,
si no, porque el Señor me ha llamado
que mis días se han terminado en este lugar,
pero no te preocupes, porque te llevo en mi corazón,
y este donde este te estaré esperando
para que caminemos de la mano
y podamos seguirnos amando,
como dos locos enamorados.
Autor: Mauricio «Maury» Olivares
karina
10 octubre, 2010 at 2:00 pmhola yosoy karina q esta muy dolida del amor q no se merese ser un ser hunmano si no tiene corazon
aby jacqueline
19 octubre, 2010 at 6:09 pmhola amigo maury cuanto tiempo ya vez como te prometi aun sigo leyendo tus poesias,hermosa como siempre esta hermosa poesia,yo entre al concurso de poesia de la escuela amigo aver como me va.
por sierto maury y karina
no ce si estes dolida amiga karina bueno mas bn si estas dolida pero recuerda amiga
el dolor no se llama dolor si no hay dolor y triztesa,
para lograr la felicidad hay que pasar por el dolor,
la felicidad no se consigue facil
almenos que luches por ella.
bye bye. los kero mucho.
KAREN JULIANA
29 marzo, 2011 at 11:45 ammuy lindo los felicito !