Desde aquel día que dejaste de sonreír,
no deje ni un instante de pensar en ti.
Cada momento de mi vida
te lo dedicaba sólo a ti.
Tu cuerpito en mis brazos
ya no estaba ahí,
sólo el recuerdo de tus gateos sobre mí.
Ahora miro las estrellas y me acuerdo de ti,
sabes mi chiquito te amo
porque eras tan maravilloso y tan lindo,
aquel que iluminaba mi vida
con tan sólo ver tu tierno mirar,
por haber sido tan bueno y especial.
Esa risa juguetona que tus labios dibujaban
y en tus mejillas rosadas resaltaba.
Nuestro cariño fue mutuo
tú sin mí no dejaste de llorar
yo sin ti mi vida vi acabar.
Ahora un ángel hermoso eres
y desde el cielo has de verme,
el destino sigue jugando
y con el tiempo vamos a reencontrarnos.
Dedicado a mi hijo que falleció hace un año, el tenia once meses y no lo he podido superar.
Enviado por: Monserrat