Amigo, te conocí pensé que no valías la pena, pero dijiste mi nombre y yo dije el tuyo, cambiaron las cosas, te comencé a ver como alguien que era parte de mi vida, no creí que te amaría, pero una amistad nos unión cada momento y las cosas bellas que me decías me hacían que cada día más me quisiera quedar contigo.
Luego tus abrazos y tus «te quiero» hicieron que algo naciera en mí, eso fue suficiente para que hoy seas todo para mi, siempre tenias algo para mi, y aunque fuera solo un caramelo para mi parecía que era como oro, solo porque lo recibía de tus manos, me mirabas y tus ojos me decían tantas cosas, y me enamore de ti.
Hoy miro todo eso y me di cuenta que realmente éramos tan felices tu y yo, pero tú sabes que te amo, y yo sé que tú que amas, pero la vergüenza nos domina o será el simple hecho de que la palabra «amistad» está entre tú y yo y ninguno no queremos destruirla .
Enviado por: Sofia C.