Se equivocó la paloma,
se equivocaba.
Por ir al norte fue al sur,
creyó que el trigo era el agua.
Creyó que el mar era el cielo
que la noche la mañana.
Que las estrellas rocío,
que la calor la nevada.
Que tu falda era tu blusa,
que tu corazón su casa.
(Ella se durmió en la orilla,
tú en la cumbre de una rama).
Anuncios:
fernanda
11 febrero, 2013 at 10:09 pmHERMOZO EL POEMA, me encanto, corto, sensillo, inspirador.
Un aplauoso al que lo creo, siempre eh admirado a los poetas.
Su imaginacion, experiensas y cosas que ven que suelen pasar en la vida,lo reflejan ahi,en los poemas.
XOXOXOXO